1) Disortografía:
Concierne a las perturbaciones de la utilización escrita de la lengua; frecuentemente va unida a los retrasos del lenguaje oral.
2) Disgrafía:
Escritura defectuosa sin que un importante trastorno neurológico o intelectual lo justifique.
3) Discalculia:
Independiente del nivel mental, de los métodos pedagógicos empleados, y de las perturbaciones afectivas, se observan en algunos niños la dificultad de integración de los símbolos numéricos en su correspondencia con las cantidades reales de objetos.
4) Disfasias y Afasia:
Disfasia es la pérdida parcial y afasia es la pérdida total del habla debida a una lesión cortical en las aéreas específicas del lenguaje, sin embargo, en la entidad que estudiamos, el concepto es insuficiente, ya que considera solo los casos en los que el niño pierde lo que tiene: el habla, pero no las situaciones como la que nos ocupa, en las que el trastorno es congénito: no se puede perder lo que nunca se ha tenido. Esta es la razón por la que este cuadro es muy discutido.
5) Disartrias:
Genéricamente, las disartrias son errores de la articulación de las palabras, que no coinciden como las normas socioculturales impuestas por el ambiente, que dificultan la inteligibilidad del discurso y que se presentan a una edad en que ya se debería tener una articulación correcta.
6) Dislexia:
Etimológicamente la palabra dislexia quiere decir aproximadamente dificultades de lenguaje. En la acepción actual se refiere a problemas de lectura, trastorno en la adquisición de la lectura.
